¿ Si una imagen vale mas que mil palabras, por qué no se debe juzgar un libro por su portada?
Hace unos días os presenté la cubierta de mi novela: El último morisco.
Según el refranero popular, no se debe juzgar a un libro por su portada, pero todos aquí sabemos que no ocurre así. Como personas, no disponemos de una segunda oportunidad para dejar una primera buena impresión.
En el caso de los libros, sucede lo mismo. Los lectores manoseamos volúmenes, les damos la vuelta; algunos hasta olfateamos discretamente las páginas cuando no hay nadie alrededor. Es cierto que desde un punto de vista racional buscamos las informaciones básicas que nos permitirán determinar si la obra se ajusta a nuestros deseos: Genero, tonalidad, estilo, etc. Cuando Pedro Viejo y yo empezamos a discutir las mejores opciones para la cubierta de mi libro. Pero, a quien no le ha ocurrido “soltar” un libro nada más ver una portada, porque algo en ella nos disgustaba o simplemente porque no nos “decía nada”.
Desde el primer momento en que Pedro Viejo y yo empezamos a discutir las opciones para la cubierta de mi libro, me di cuenta de que para él la tarea era tan importante como para mí.
Hubo mucha sintonía entre nosotros y enseguida nos pusimos de acuerdo en las líneas maestras del proyecto, y aunque durante el proceso no coincidimos del todo en algún aspecto, al final Pedro tuvo la paciencia de “educarme “, haciéndome ver los pros y contras de cada decisión.
Por su lado Pedro se tomó el tiempo de averiguar cuáles eran los aspectos relevantes de la obra y que puntos eran los más sensibles para mí. Fue capaz de entender lo que me emocionaba en mi obra y plasmarlo en las dos propuestas finales”.

UNAS PALABRAS DEL DISEÑADOR EDITORIAL PEDRO VIEJO.
El trabajo con Diego fue muy fácil. Quizás porque ha trabajado muchos años en temas de marketing, había nociones que tenía interiorizadas y que captó a la primera.
«El último morisco» es una novela histórica especial, porque trata un tema poco conocido (la deportación de los moriscos de Andalucía a Castilla) y porque tiene detrás una gran labor de documentación. Me quedé alucinado de la cantidad de dosieres que Diego tenía con información que ha ido recopilando. La labor de toda una vida.
Por eso la cubierta no podía ser una más. Hay muchas portadas de novela histórica que se parecen mucho las unas a las otras, y teníamos claro que eso no lo queríamos. Así que exploramos un par de vías, una más conceptual y la otra más emocional. Finalmente escogimos esta última, y ha sido una cierto porque además de transmitir una época nos transmite una emoción. Es sencilla, directa, con algo de misterio y creo que va a funcionar muy bien.
Si queréis saber más sobre, El último morisco, visitad mi WEB: https://diegoramos.net/
o sobre Pedro Viejo y su empresa, visita la WEB: http://pedroviejo.com/portadas/?gclid=CjwKCAjwy_aUBhACEiwA2IHHQPSwSngJSrksftCXhXKr3RQadUw1tfARzCUb__VZxs_5Lkuw07N6_BoCjCQQAvD_BwE